SANTIAGO DE COMPOSTELA:
donde el Apóstol con solemne majestad, acoge el cálido abrazo del cansado
peregrino, donde termina el camino de las estrellas y comienza el sendero de la
vida.
¡¡ Santiago de Compostela !! Lugar de penitencia y de
oración. Lugar de silencio y abrazos silenciosos.
A. Castro
A. Castro
Al celebrar tu memoria,
Santo Apóstol peregrino,
guíanos por el camino
al Pórtico de la Gloria.
Camino de Compostela,
va un romero caminando
y es el camino de estrellas
polvareda de sus pasos.
En el pecho las vieiras,
y el alto bordón en la mano,
sembrando por la vereda
las canciones y los salmos.
Llévale, romerico,
llévale a Santiago,
llévale, romerico,
llévale un abrazo.
Romeros, sólo romeros,
dile que peregrinamos
con la mirada en el cielo
desde la aurora al ocaso.
Camino de Compostela,
todos los hombres, hermanos,
construyendo un mundo nuevo
en el amor cimentado.
Llévale, romerico,
llévale a Santiago,
llévale, romerico,
llévale un abrazo.
Ven, Santiago, con nosotros,
que tu bordón es un báculo,
el cayado del pastor
para guiar el rebaño.
¡Santo Apóstol peregrino,
llévanos tú de la mano
para ir contigo hasta Cristo,
Santiago el Mayor, Santiago!
Llévale, romerico,
llévale a Santiago,
llévale, romerico,
llévale un abrazo.
(Liturgia de las Horas. Laudes 25 de julio)
Clic para escuchar: Himno al Apóstol Santiago
Santo Apóstol peregrino,
guíanos por el camino
al Pórtico de la Gloria.
Camino de Compostela,
va un romero caminando
y es el camino de estrellas
polvareda de sus pasos.
En el pecho las vieiras,
y el alto bordón en la mano,
sembrando por la vereda
las canciones y los salmos.
Llévale, romerico,
llévale a Santiago,
llévale, romerico,
llévale un abrazo.
Romeros, sólo romeros,
dile que peregrinamos
con la mirada en el cielo
desde la aurora al ocaso.
Camino de Compostela,
todos los hombres, hermanos,
construyendo un mundo nuevo
en el amor cimentado.
Llévale, romerico,
llévale a Santiago,
llévale, romerico,
llévale un abrazo.
Ven, Santiago, con nosotros,
que tu bordón es un báculo,
el cayado del pastor
para guiar el rebaño.
¡Santo Apóstol peregrino,
llévanos tú de la mano
para ir contigo hasta Cristo,
Santiago el Mayor, Santiago!
Llévale, romerico,
llévale a Santiago,
llévale, romerico,
llévale un abrazo.
(Liturgia de las Horas. Laudes 25 de julio)
Clic para escuchar: Himno al Apóstol Santiago